Sobre el Proyecto DreamLand Studios
Para el Comité Ejecutivo del Clúster Audiovisual de Canarias la realización de grandes proyectos como DreamLand Studios supone apostar de manera ambiciosa por el desarrollo del sector audiovisual en Canarias, colocando en primer término a una industria basada en el conocimiento, la tecnología y la creatividad.
Son múltiples y numerosos los documentos oficiales que animan a todos los escalones de la administración pública a apoyar de manera firme al audiovisual como sector clave para el mantenimiento, recuperación y diversificación de la economía. En concreto, el Pacto para la Reactivación Social y Económica de Canarias establece que “Las industrias creativas estarán dentro de las estrategias de desarrollo económico y en la internacionalización de la economía canaria. Sectores como el audiovisual ofrecen una oportunidad de diversificación en actividades de alto valor añadido, atrayendo otro tipo de servicios."
A nivel nacional, el reciente Plan España Digital 2020-2025 fija como uno de sus diez objetivos prioritarios para este lustro el de “mejorar el atractivo de España como plataforma europea de negocio, trabajo, e inversión en el ámbito audiovisual”. Además, desde el Ejecutivo central se está promoviendo la creación de un Hub Audiovisual español. Para lograr todo ello, es indudable que se necesitan nuevas infraestructuras y equipamientos de última generación para competir en el mercado actual de rodajes, un sector que sigue teniendo una alta demanda de consumo y, por tanto, de platós y espacios de filmación específicos, como los que también se están finalizando en la isla de Gran Canaria, promovidos directamente por el cabildo insular, así como de posproducción.
En este caso, los estudios cinematográficos que forman parte de DreamLand Studios incorporan la presencia de Sebastián Álvarez, un productor de larga trayectoria en las Islas desde los años 90, promotor y miembro fundador de este Clúster audiovisual, y componente activo de su Comité Ejecutivo donde ha ocupado diferentes puestos de representación (desde el primer presidente hasta el actual tesorero). Álvarez ha producido, además, relevantes proyectos de services y coproducciones internacionales, así como filmes de producción propia, varios de ellos en la isla de Fuerteventura, siempre en alianza con los profesionales canarios y los agentes locales.
Para el CLAC el sector audiovisual o es sostenible o no lo es. No puede ser considerado algo colateral o anecdótico. Forma parte de su propia esencia, ya que los paisajes y el territorio son la materia prima con la que trabajamos a diario. Dependemos de ello y de su cuidado, y es algo que hemos demostrado, aplicado todo tipo de protocolos y medidas especiales. A ello se suma el hecho de que el cine es una actividad ya de por sí muy sostenible, que no produce prácticamente residuos y que la escasa contaminación que genera se reduce aún más al concentrar la actividad en platós. Por tanto, si se quiere apostar en firme por el cambio de modelo económico y fomentar el desarrollo de las industrias creativas, se necesitan proyectos tractor que hagan de palanca, para que el sector audiovisual y cinematográfico pueda ser una parte importante del PIB. Por ello, instamos a las autoridades competentes a no dejar pasar la oportunidad de apoyar estos proyectos, en los momentos clave, para que puedan seguir siendo tramitados, evaluados y validados por las instancias públicas que correspondan.